Año 1912 - (Autor: Lorenzo Almarza) - (Fuente: Diputación de Huesca)
Anteriormente se llamaba Plaza de Castilla, El Mentirón y Plaza Vieja
«¡La Plaza de la Virgen Blanca! Poesía en el nombre y poesía en las cosas. Belleza en el conjunto y belleza en los recuerdos a que da lugar. ¿Hay algún alavés que pueda olvidar que, la hoy así llamada, fue la antigua Plaza de Castilla? ¡Oh, no! La vida cambia: las cosas son movedizas, se suceden unas a otras; pero ciertos hechos dan lugar a la formación de ambientes que se imponen a la labor destructora que realiza el tiempo. Así esta plaza, y algunas de las calles que a ella afluyen, tienen un sello inconfundible: personalismo. Mezcla de viejo y de nuevo, de lejana visión de recuerdos y de lejano presente de realidades, que las ciudades han de tener historia, mostrar rincones vetustos, piedras antañonas, porque si se compusieran de edificios novísimos, recién abandonados de los arquitectos, todos blancos y todos relucientes, serían a modo de hijos sin padre. Vitoria, y con ello es muy feliz, tiene respeto a su pasado». (Fuente: Revista "Vida Vasca" - año 1925)
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