Colegio Inmaculada de Abechuco

Año 1965 - (Autor: Alberto Schommer Koch) - (Fuente: ATHA) 

Niños jugando en el patio del colegio religioso del barrio

«En el año 1965 se inauguró el colegio de María Inmaculada en lo que hoy ocupan las primeras viviendas de la acera impar de la calle Txarrakea. Esta comunidad de monjas estuvo presente en el barrio desde su inicio y años más tarde, en 1974, se inauguró el actual colegio en el que aún permanecen. Abetxuko pasó de 1800 habitantes en 1964 a más de 6000 a mediados de los años setenta. En 1961 se inauguró la iglesia de San José Obrero. En el año 1970 se abrió el dispensario donde hoy se encuentra el ambulatorio. En un principio prestaba sus servicios ubicado en una casa de dos alturas habilitada para tal uso. Un año antes se inauguró el colegio público Luis Eusebio, donde actualmente se encuentra la residencia de ancianos. Como consecuencia del crecimiento, el primer colegio público levantado en el barrio, que actualmente ocupa la Ikastola, tuvo que ser ampliado para hacer frente al incremento de alumnos».  (Fuente: Alberto García)

Colegio Marianistas

4 de mayo de 1957 - (Autor: Santiago Arina) - (Fuente: AMVG) 

Durante algunos años se llamó Colegio Minerva

«Fue fundado por los Religiosos Marianistas en el año 1890, con el nombre de Colegio Santa María. En 1933 comenzó a regentarlo la Sociedad Mutua Minerva, que puso decidido empeño en que el Colegio guardase el carácter y el espíritu que le dieron sus beneméritos fundadores. El espíritu que le informa, tanto en el conjunto como en los detalles, es el mismo que reina en toda familia cristiana: solicitud y esmero paternales por parte del maestro y, por parte del discípulo, filial docilidad, respeto a todo lo bueno y, en especial, a la autoridad, amor al orden, al trabajo, a las buenas costumbres y a los modales nobles y distinguidos».  (Fuente: Revista "Vida Vasca")

En tiempos de la II República tuvo que cambiar su nombre, pasando a denominarse Minerva, en honor a la diosa romana del saber y las artes. Tenía la entrada por el número 6 de la calle Castilla y en el centro eran admitidos alumnos internos, medio-pensionistas y externos.

Manuel Soloa y el cine sonoro

Hacia el año 1962 - (Autor: Foto ARQUÉ) - (Fuente: AMVG) 

El operador que inauguró el cine sonoro en Vitoria

«Manuel Soloa, el que era operador de cine más antiguo de Vitoria en ese momento, nació en la Correría. Vivió en primera persona el paso del cine mudo al sonoro. Llevaba 36 años proyectando películas desde que en 1925 entró en la cabina del Ideal Cinema, ubicado en la calle Florida, frente a la desaparecida gasolinera. Fue el primer cine de la ciudad, una vez que la empresa VESA transformó el viejo Teatro Circo. Soloa fue quien inauguró el cine sonoro en Vitoria, el 13 de febrero de 1929, con la película El cantor de jazz, que marcó el comienzo del cine parlante. Unos meses antes proyectó una película de Carlos Gardel, con la sala abarrotada. ´No se oía más que música, pero para nada se oía a Gardel ´. El público rompió 30 butacas y hubo que devolver el dinero. Sobraron 59 pesetas. A la salida le agarraron de la camisa a Soloa y se la rompieron. El señor Alberdi le entregó el dinero sobrante para que se comprara otra camisa».  (Fuente: Sergio Carracedo)

Colegio Niño Jesús

Año 1932  -  (Autor: Ceferino Yanguas) 

Representación teatral en el centro de las Carmelitas

«En esa época el colegio del Niño Jesús estaba situado junto al actual Pasaje de San Pedro. En 1870 Vitoria contaba con unos 20.000 habitantes e iniciaba su expansión fuera de las murallas de la villa medieval. En la ciudad había dos escuelas para niños, otro par de ellas para niñas y una de parvulitos. En este contexto cinco Hermanas Carmelitas construyeron los cimientos del Niño Jesús, convertido hoy en día en el colegio más antiguo de la capital alavesa. Han pasado más de 150 años desde que comenzara su andadura en una casa en el número 114 de la calle Cuchillería. "Era una situación precaria y allí solo estuvieron alrededor de un año, el espacio era insuficiente y antihigiénico". Al año siguiente, el proyecto educativo se trasladó a una nueva casa en la calle Herrería, colindante con la iglesia de San Pedro, después de que el alcalde Francisco Juan de Ayala comprara el portal número 63 y se lo cediera a la congregación».  (Fuente: Sara López de Pariza)

Cuesta de San Francisco

Hacia el año 1885 - (Autor: anónimo) - (Fuente: AMVG) 

Se debe su nombre al convento que hubo en las inmediaciones

«En la esquina con la calle Pintorería hace mucho que se instaló el relojero Ángel González de Mendoza, a quien sucedió su hijo. Fue también conocida en el número 9 la confitería de Hueto. Otros establecimientos que fueron conocidos: el taller de pintura y decoración de Sarriá y el de loza de Emilio Fernández. En el número 5 estuvo la baulería de Alfonso García, concejal que fue del Ayuntamiento de Vitoria y diputado provincial en 1934; padre de los populares toreros vitorianos, que con él trabajaban: Justo y Rafael García, "Gitanillo de Vitoria". En la última casa, esquina a la calle Nueva Dentro, en el lugar ocupado por el bar, fue muy conocido durante años la tienda de ultramarinos de Juan Cruz Fernández de Retana, que también fue concejal del Ayuntamiento de Vitoria. Era sitio muy concurrido por gente de las aldeas próximas, principalmente de Ilárraza y Junguitu».  (Fuente: Venancio del Val - año 1979)

Escuela de Labastida

Año 1932

Don José Fidel Ortiz de Anda con sus 52 alumnos, frente al Ayuntamiento

«El maestro vitoriano José Fidel Ortiz de Anda se empleó a fondo en la labor de regeneración educativa durante los años de la República en la Escuela de Labastida, como director de la misma. En esa tarea publicó un libro divulgativo en 1932 donde, el joven profesor de 26 años, pretendía actualizar los textos de lectura y comprensión con los que entonces se trabajaba en la escuela. La Escuela de Labastida de aquella época creó y desarrolló actividades para el conocimiento, cultivo y cuidado del campo y otras tareas relacionadas con éste, con ejercicios prácticos que se realizaban en el terreno anejo a la Escuela Nacional del pueblo. La represión franquista puso en su objetivo al profesorado republicano. El 7 de octubre de 1936 el joven José Fidel Ortiz de Anda Guinea fue fusilado en Vitoria por el fascismo. El delito del maestro y director de la Escuela de Labastida era ser profesor republicano y dirigente sindicalista».  (Fuente: www.labastida1933.wordpress.com)

Portal de Aldave

Año 1956 - (Autor: Santiago Arina) - (Fuente: AMVG) 

Hasta hace poco alcanzaba el camino de la Cruz Blanca

«Aldabe es el nombre primitivo de la calle, si bien antes se llamaba Portal de Aldabe, voz vascongada que quiere decir: "al pie o debajo de la cuesta". Se le dio este título en el siglo XIII y fué parte del barrio de su nombre. Principia entre las calles de las Cercas Bajas y el Campo de los Sogueros y concluye en la calle del juego de la Pelota».  (Fuente: José Colá y Goiti - año 1901)

«Hacia el centro de la calle, a la derecha, por donde ahora se penetra a la calle "Kutxa", estaba la plazuela de la Ciudadela, para conservación de cuyo recuerdo y nombre se pasó éste a la plaza que hoy lo ostenta cuando ya estaba prevista la desaparición de la anterior. Así se llamaba por el aspecto que tenía. Una plaza cerrada, constituida por unas pocas y pequeñas casas. En ellas hubo también una curtidería, que estaba a nombre de Juana Baroja últimamente, y una jabonería. Inmediatamente se encontraba la panadería de Araya».  (Fuente: Venancio del Val - año 1979)

Colegio Sagrado Corazón

Año 1966 - (Autor: Alberto Schommer) - (Fuente: ATHA) 

Tres alumnas del colegio religioso de la calle Los Fueros

«En 1894 se fundó el Colegio Carmelitas Sagrado Corazón en Vitoria con un proyecto claro: responder a una necesidad social, la educación académica y moral de las niñas. Con carácter innovador desde su inicio y que va a marcar su andadura a lo largo de más de un siglo de existencia. Según consta en una estadística municipal del año 1878, el primer colegio religioso para niñas que se estableció en Vitoria fue el de las Carmelitas de la Caridad. Esta Asociación, llamada Colegio del Niño Jesús, obtenía la autorización del obispo de la diócesis y de las autoridades, instalándose en una casa particular, en el número 114 de la calle Cuchillería, bajo la dirección de nueve Hermanas Carmelitas de la Caridad. En el momento de la estadística se afirmaba que el número de alumnas era de 225, de las que 140 asistían a la enseñanza de pobres externas, 70 externas de pago y 15 acogidas internas».  (Fuente: Francisca Vives Casas)