Un belén familiar

Diciembre de 1952  -  (Autor: Alberto Schommer Koch)
Decoración navideña en la casa de una familia vitoriana

«Empujado por su tirón de visitas cada Navidad, el convento de los Carmelitas se ha aupado como sede del mejor pesebrismo. Las muestras, los concursos escolares y los talleres de aprendizaje que organiza cada año la asociación han contribuido a alcanzar ese reconocimiento con varios premios y la visita de más de 30.000 personas cada campaña. La faceta más singular de montar belenes es que se trata de un ritual casero, familiar. Y aquí el talento personal marca las diferencias. También se hacen belenes de tela, de cristal, de material reciclado, con corchos o de inspiración egipcia. Pero si hubiera que señalar un elemento técnico sería la aparición del poliespán en sustitución de la trabajosa escayola. Aunque lo que realmente da valor a un Belén son sus figuras. Y las de mayor valor simbólico son las figuras que componen el originario de la parroquia del Carmen, que se montó por primera vez en el año 1984».  (Fuente: María Zabaleta)