Voluntarios alaveses, a favor de la sublevación militar
«En la década de 1930, Álava era una provincia especialmente agrícola y con una población profundamente católica, con una escasa violencia sociopolítica y altos niveles de distribución de la propiedad. Sin embargo, en julio de 1936, se convirtió en una de las provincias con mayor porcentaje de la población masculina alistada voluntariamente para combatir contra la II República. Una gran parte de la movilización antirrepublicana provenía del mundo rural tradicional. La movilización se dio en Álava a través de su milicia derechista más numerosa y poderosa. El Requeté fue el brazo armado de la Comunión Tradicionalista, bajo las que se articuló el carlismo durante los años republicanos. Son pocas las noticias anteriores a la Guerra Civil sobre el Requeté alavés. Durante la Restauración se organizó en varias localidades alavesas, participando en las actividades públicas del carlismo: misas, desfiles y mítines». (Fuente: Germán Ruiz Llano)
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